Resolvemos tus dudas
No. Es una cirugía ambulatoria, con anestesia local mediante gotas. El paciente está despierto pero no siente dolor, solo una ligera presión o molestia leve.
La cirugía suele durar entre 15 y 30 minutos por ojo. En la mayoría de los casos el paciente puede volver a casa el mismo día.
La visión mejora de forma rápida, muchas veces desde el primer día. Aun así, la adaptación completa puede tardar algunos días o semanas, según el caso.
Además de las lentes monofocales estándar, existen lentes premium (multifocales o tóricas) que reducen la necesidad de usar gafas para cerca, lejos o ambas. En este caso usamos, además, láser femtosegundo en la cirugía, aunque tu oftalmólogo te recomendará la opción más adecuada.
La cirugía de cataratas suele realizarse en dos tiempos, interviniendo primero un ojo y, tras unos días o semanas, el segundo. Esto permite una recuperación más segura y una mejor adaptación visual.
En casos concretos, y tras la valoración del especialista, puede plantearse la cirugía de ambos ojos en la misma sesión, siempre que el estado ocular y general del paciente lo permitan. En Vithas, nuestros oftalmólogos te orientarán sobre la opción más adecuada para tu caso.
Una de las ventajas de operarse en Vithas es que esta intervención no requiere de ingreso, a priori.
Sí. La mayoría de los pacientes retoman su actividad en pocos días o semanas.
Sí. En Vithas ponemos a tu disposición opciones de financiación para que puedas realizar tu cirugía de cataratas de forma cómoda y adaptada a tus necesidades. Nuestro equipo te informará de las diferentes modalidades y plazos disponibles en el momento de tu consulta.
En Vithas, nuestro presupuesto está diseñado para ofrecerte una experiencia quirúrgica completa y sin sorpresas. Incluye todos los aspectos necesarios para que te sientas acompañado y seguro en cada etapa del proceso:
Antes de la cirugía:
- Consulta preoperatoria con el especialista.
- Pruebas médicas necesarias: análisis de sangre, electrocardiograma, ecografía u otras según tu caso.
- Valoración con el anestesista, para garantizar que todo esté preparado para el día de la intervención.
Durante la cirugía:
- Intervención bajo los más altos estándares médicos, con técnicas avanzadas y mínimamente invasivas.
- Ingreso hospitalario, si es necesario, con atención especializada.
Después de la cirugía:
- Seguimiento postoperatorio personalizado, con revisiones médicas y control de tu evolución.
- Tratamientos complementarios, si el equipo médico los considera necesarios para tu recuperación.