La salud bucal es de vital importancia ya que cualquier alteración o trastorno en la boca repercute en el estado general de la persona. La boca es la ventana de la salud del cuerpo, ya que es la puerta de entrada de los alimentos, siendo fundamental para funciones como la digestión y la nutrición...
La salud bucal es de vital importancia ya que cualquier alteración o trastorno en la boca repercute en el estado general de la persona. La boca es la ventana de la salud del cuerpo, ya que es la puerta de entrada de los alimentos, siendo fundamental para funciones como la digestión y la nutrición alimentarias.
Para mantener una boca sana es fundamental cepillarse los dientes periódicamente. De hecho, el cepillado debe ser la base de una correcta rutina de higiene bucodental. No obstante, varios estudios han demostrado que el cepillado es insuficiente para eliminar todos los restos de bacterias y alimentos.
De ahí la importancia de complementarlo con la limpieza interdental (entre dientes y encías). Uno de los mejores aliados para una buena higiene interproximal es el hilo dental y los cepillos interdentales.
El enjuague bucal es otro complemento del cepillado, recomendable que contenga flúor para ayudar a la remineralización dental, así como el cepillado de la lengua utilizando un limpiador lingual.
Además de la limpieza diaria en casa, es importante acudir a revisiones periódicas al odontólogo, quien puede detectar algunos problemas bucales que no dan la cara o no son visibles a simple vista, así como limpiezas profesionales al menos una vez al año.
¿Se pueden prevenir las caries?
La caries dental se produce cuando las bacterias que se encuentran en la placa (película pegajosa que se forma sobre la superficie de los dientes y alrededores) metabolizan los azúcares y los convierten en ácidos. Éstos debilitan los dientes y predisponen a la aparición de caries entre otros problemas bucales.
La prevención de las caries se basa en cuidar la higiene bucal y acudir a revisiones dentales periódicas hechas por profesionales de la salud bucodental, quienes pueden detectar caries incipientes (no visibles a la inspección clínica) evidenciables con radiografías detalladas de los dientes. En fases iniciales la caries dental se elimina relativamente fácil mediante limpieza y sellado de la superficie dental afectada.
Por otro lado, el uso regular de flúor es una forma eficaz de prevenir la aparición de caries. Las pastas dentífricas y enjuagues bucales con flúor ayudan a reforzar el diente, aumentando así su resistencia a los ataques de los ácidos y son menos vulnerables ante la caries.
