El verano trae diversión al aire libre para los niños, pero también aumenta el riesgo de otitis, quemaduras solares e infecciones cutáneas. La Dra. Carolina Sanz comparte consejos clave para prevenir estos problemas comunes y garantizar un verano seguro y saludable para tus hijos.
El verano es una época fantástica para que los niños disfruten de sus vacaciones y de numerosas actividades al aire libre. Sin embargo, también es una temporada en la que aumentan ciertas consultas pediátricas debido a problemas comunes como otitis, quemaduras solares e infecciones de la piel.
El perfil del paciente más común durante los meses de verano es un niño activo, generalmente entre 4 y 12 años, que disfruta plenamente de las actividades al aire libre. Estos niños suelen pasar gran parte de su tiempo en la piscina, en la playa o jugando en el parque, involucrándose en actividades acuáticas y deportes al aire libre.
Este estilo de vida activo, aunque saludable y beneficioso, aumenta la probabilidad de padecer alguno de estos problemas. Aquí te damos algunos consejos para asegurar que tus hijos puedan disfrutar de un verano saludable y sin contratiempos:
Otitis externa: la infección común del verano
Las infecciones del conducto auditivo, conocidas como otitis externas, son muy comunes durante el verano. Bucear y nadar en piscinas, playas, etc. puede aumentar el riesgo de esta afección. La pediatra Carolina Sanz explica que estas infecciones representan una preocupación significativa para los padres. Para prevenir la otitis externa:
- Usa tapones para los oídos: Protegen los oídos de la entrada de agua.
- Seca bien los oídos: Utiliza un spray especial para mantener los oídos secos y libres de humedad después de nadar.
- Evita la entrada de agua: Enseña a tus hijos a no sumergirse demasiado profundo para minimizar el riesgo de que el agua entre en sus oídos.
Quemaduras solares: protección contra el sol
Las largas horas bajo el sol pueden causar dolorosas quemaduras solares si no se toma la protección adecuada. La Dra. Sanz señala que es crucial proteger a los niños de la exposición solar excesiva. Recomienda:
- Aplicar protector solar: Usa un protector con SPF 30 o más y reaplícalo cada dos horas y después de nadar.
- Ropa protectora: Fomenta el uso de sombreros, gafas de sol y ropa que cubra la piel para evitar la exposición directa.
- Horarios adecuados: Evita la exposición solar directa entre las 11:00 y las 17:00, cuando los rayos UV son más intensos.
Infecciones de la piel en verano: mantén la higiene
El contacto constante con superficies y la exposición a ambientes húmedos pueden facilitar la aparición de infecciones cutáneas. Para evitarlo:
- Higiene diaria: Lava la piel de tus hijos diariamente con agua y jabón, prestando especial atención a cualquier herida o rozadura.
- Cuida las heridas: Aplica un antiséptico en cualquier herida o rozadura para prevenir infecciones y asegurar una rápida cicatrización.
- Ropa limpia: Asegúrate de que tus hijos usen ropa limpia y seca, especialmente después de actividades acuáticas.
Finalmente, para asegurar que tus hijos disfruten plenamente de sus vacaciones sin problemas de salud, es esencial que te informes y actúes de manera preventiva. Sigue estos consejos y mantente alerta a cualquier signo de estas afecciones. Con las medidas adecuadas, puedes asegurarte de que tus hijos tengan un verano seguro y lleno de diversión
Proteger la salud de los más pequeños durante el verano es esencial para que puedan aprovechar al máximo esta maravillosa temporada. Disfruta de un verano con cuidado y precaución.