¿Cómo se trata la tortícolis muscular congénita en bebés?

¿Cómo se trata la tortícolis muscular congénita en bebés?

Compartir

La tortícolis muscular congénita es una condición que afecta a un porcentaje significativo de los recién nacidos, siendo la causa más frecuente una lesión del músculo esternocleidomastoideo debido a la posición del feto dentro del útero o causada durante el parto.

Aunque se manifiesta principalmente como una inclinación del cuello, los efectos de la tortícolis muscular congénita pueden ir mucho más allá, interfiriendo en el desarrollo motor, sensorial y postural del bebé. Es importante comprender que la tortícolis muscular congénita puede estar presente al nacer o desarrollarse en los primeros meses de vida, por lo que un diagnóstico temprano es esencial para aplicar un tratamiento adecuado.

Recuerda, no todo es normal y no todo se cura con el paso del tiempo. El diagnóstico y tratamiento adecuados a tiempo son esenciales para asegurar un desarrollo óptimo en los bebés con tortícolis muscular congénita.

¿Por qué es importante un diagnóstico temprano de la tortícolis muscular congénita?

El diagnóstico precoz es clave para poder implementar un tratamiento integral que incluya fisioterapia especializada. No cualquier tipo de fisioterapia es efectiva para esta condición, por lo que es fundamental contar con profesionales capacitados en técnicas específicas como la movilización articular y la liberación de tejidos blandos. Estas técnicas ayudan a mejorar y equilibrar la movilidad cervical del bebé, facilitando su desarrollo físico y motor.

Además, es necesario integrar estos tratamientos en el neurodesarrollo del bebé, estimulando su desarrollo a través de juegos y ejercicios que favorezcan tanto la movilidad cervical como la estimulación sensorial.

Fisioterapia pediátrica

Es importante recordar que las cervicales del bebé son fundamentales para su desarrollo y crecimiento. Por eso, realizar una evaluación global y específica de su sistema neuromusculoesquelético es esencial, especialmente en casos de tortícolis muscular congénita. El tratamiento de esta patología pasa por la estimulación muscular realizada por especialistas en fisioterapia infantil, siempre bajo la prescripción del especialista en pediatría.

Otro aspecto clave es proporcionar una estimulación visual adecuada, ya que las vías neurológicas del sistema visual y cervical están interconectadas. La correcta estimulación visual puede ayudar a facilitar la recuperación y mejorar la postura del bebé de manera natural.

Consejos relacionados