El dolor de rodilla es un motivo de consulta muy frecuente en nuestra práctica clínica diaria y puede afectar a personas de todas las edades. La ubicación e intensidad del dolor de rodilla puede variar según la causa del problema. Los signos y síntomas que a veces acompañan al dolor son: In...
El dolor de rodilla es un motivo de consulta muy frecuente en nuestra práctica clínica diaria y puede afectar a personas de todas las edades. La ubicación e intensidad del dolor de rodilla puede variar según la causa del problema. Los signos y síntomas que a veces acompañan al dolor son:
- Inflamación y enrojecimiento
- Dificultad de movimiento y bloqueo
- Chasquidos o crujidos, fallos
- Derrame articular
- Debilidad o inestabilidad
Causas
Las causas de dolor en la rodilla pueden ser múltiples siendo la rotura de los meniscos una de las lesiones que más frecuentemente generan dolor en dicha región.
Los meniscos son como dos almohadillas interpuestas que mejoran la congruencia articular entre el fémur y la tibia, además, tiene otras múltiples funciones como:
- Distribuir fuerzas de carga
- Disminuir el contacto entre el fémur y la tibia
- Amortiguar el impacto
- Estabilizar la rodilla
La rotura del ligamento cruzado anterior (LCA) también es otra de las causas más frecuentes de dolor e inestabilidad de rodilla. Este ligamento es uno de los principales elementos estabilizadores de dicha articulación.
La rotura del LCA suele producirse durante la práctica de deportes que implican saltos y giros bruscos con cambios de dirección de forma repentina: como en el fútbol, baloncesto, balonmano, vóleibol, gimnasia y cómo no, en el esquí alpino.
Pero si entramos en la población de mayor edad, la gonartrosis o artrosis de rodilla es sin duda la causa más frecuente de dolor de rodilla.
La artrosis es una enfermedad degenerativa en la que se produce una destrucción progresiva de una articulación. Con el progresivo envejecimiento de la población, la prevalencia de dicha enfermedad cada vez es más frecuente, llegando a afectar hasta el 80% de la población española de más de 65 años.
Factores de riesgo
Algunos de los principales factores de riesgo para padecer dolor en la rodilla son:
- Sobrepeso y obesidad:tener sobrepeso y obesidad aumenta la carga sobre las articulaciones y dicho aumento genera la aparición de lesiones meniscales, lesiones del cartílago y artrosis
- Falta de flexibilidad, fuerza muscular y entrenamiento: la falta de fuerza y flexibilidad favorecen las lesiones dolorosas. El entrenamiento fortalece la musculatura y nos previene de la aparición de dichas lesiones.
- Deportes de riesgo: ciertos deportes como el esquí alpino, fútbol, balonmano y baloncesto aumentan el riesgo de lesiones en las rodillas.
- Lesión previa: Tener una lesión de rodilla previa aumenta el riesgo de sufrir otras lesiones.
¿Cuándo se operan estas lesiones?
La respuesta a cuándo se debe operar es sencilla:cuando esté indicado, se tenga un diagnóstico preciso y la cirugía sea la mejor solución.
La mayoría de las lesiones inicialmente se tratan con un tratamiento conservador o no quirúrgico: fisioterapia, ejercicios de estiramiento, fármacos anti-inflamatorios, condroprotectores, infiltraciones, etc.
Cada día hay más estudios sobre del uso de infiltraciones intrarticulares de ácido hialurónico y plasma rico en plaquetas (PRP-FCP) como tratamiento del dolor de rodilla, de las lesiones de cartílago, de las lesiones meniscales, artrosis, etc… y sobre cómo dichas infiltraciones pueden retrasar el momento de tener que Intervenirse de una prótesis de rodilla.
Hay lesiones, como la rotura del ligamento cruzado anterior, las fracturas deslazadas, los bloqueos por asa de cubo meniscal, etc., que inicialmente son de indicación quirúrgica prácticamente inmediata.
La artroscopia de rodilla nos permite tratar la mayoría de estas lesiones causantes de dolor mediante mínimas incisiones donde introducimos una cámara e instrumental para realizar la reparación de la lesión sin dañar las estructuras sanas de alrededor.
Cuando hay una artrosis avanzada, la cirugía de artroplastia tricompartimental de rodilla, prótesis de rodilla, permite recuperar la alineación normal del eje de carga, la movilidad, disminuir de forma muy significativa el dolor, y en general, recuperar la funcionalidad perdida.