El verano es la estación preferida del año para muchos en la que intentamos descansar, disfrutar del sol, leer, viajar… Este verano, el segundo desde que empezó la pandemia por la covid-19, la Dirección General de Tráfico (DGT) tiene previsto que los desplazamientos por carretera vuelvan a au...
El verano es la estación preferida del año para muchos en la que intentamos descansar, disfrutar del sol, leer, viajar… Este verano, el segundo desde que empezó la pandemia por la covid-19, la Dirección General de Tráfico (DGT) tiene previsto que los desplazamientos por carretera vuelvan a aumentar a niveles de 2019. Se estima un total de 91,1 millones de desplazamientos durante estos meses. Por ello, la Dra. Ana María Vílches, psiquiatra de Vithas Sevilla, ofrece consejos para que estos desplazamientos sean una experiencia divertida para los más pequeños.
A la hora de iniciar cualquier tipo de desplazamiento debemos preparar a los niños durante el viaje con actitud positiva y como una experiencia divertida. Debemos hablar con ellos durante el trayecto, interesarnos por actividades que les hacen disfrutar y planificar entre todos las vacaciones. Las actividades que elijamos tienen que adaptarse a las edades de los niños que viajan en el coche. “Entre las más interactivas se encuentran juegos clásicos como el veo veo, palabras encadenadas o adivinanzas. Los audiocuentos son otro recurso útil, aunque también podemos contar un cuento en el que cada uno invente un fragmento”, señala la especialista. Además, “un concurso sobre tablas de multiplicar o sobre términos en inglés pueden estimular la concentración y el refuerzo de lo estudiado durante el curso escolar”.
Los desplazamientos en coche suelen ser aburridos para los más pequeños. Sin embargo, si hacemos ese trayecto atractivo para ellos, se convertirá en una experiencia gratificante y provechosa para toda la familia.
Recopilar previamente una lista de canciones con los temas preferidos de cada niño es otra de las ideas que nos planeta la especialista para momentos de más tranquilidad durante el viaje. Además, el viaje hasta llegar al destino también es un momento ideal en el que podemos intentar simplemente hablar con ellos, interesarnos por lo que más les ha hecho disfrutar durante el curso, o las ocasiones en las que se han sentido tristes, a qué amigo les habría gustado llevarse con ellos de viaje, con quién preferirían coincidir el curso siguiente, o cómo se imaginan de mayores.
“Cuando tengamos que reñirles, hay que intentar mantener siempre la serenidad, aunque no sea fácil porque el trayecto, en el más amplio sentido de la palabra, es a veces cansado para todos”, explica la especialista.
El verano es muy buen momento para crear en la memoria de los niños recuerdos bonitos en familia, puntualiza la Dra. Vilches. Por ello, “es fundamental pasar tiempo con ellos, por encima de viajes espectaculares o dispositivos electrónicos de última generación”.
