La fisioterapia invasiva consiste en un conjunto de técnicas enfocadas a la reparación de diferentes tejidos como el sistema muscular, ligamentoso y tendinoso, realizadas en su mayoría a través de una aguja con seguimiento ecoguiado.
Esta nueva herramienta terapéutica que favorece la resolución del proceso de dolor, permite acortar tiempos de recuperación y evitar recaídas en las lesiones tratadas, además es una alternativa a la cirugía convencional.
La Unidad de Fisioterapia del Hospital Vithas Medimar incorpora esta nueva modalidad en sus tratamientos, que ofrece nuevas técnicas invasivas y poco frecuentes, como por ejemplo la neuromodelación percutánea, la electrolisis y la punción seca.
Agujas con seguimiento ecoguiado
Para este tipo de tratamientos, se precisa el uso de agujas de calibre fino que producen dos tipos de efectos sobre el organismo. El primero es el efecto mecánico de mecanotransducción que se produce en el momento en el que la aguja atraviesa el cuerpo y sus tejidos.
El segundo es el uso de la corriente eléctrica a través de la aguja con el fin de aproximarse a estructuras más profundas como puedan ser un tendón, un músculo, una fascia o un nervio con la finalidad de provocar un efecto bioquímico para favorecer la recuperación de los tejidos lesionados.
Existen numerosos estudios en la actualidad que demuestran la efectividad de estos tratamientos para mejorar la funcionalidad y disminuir el dolor de los pacientes, las lesiones en las que permite una notable mejoría son las tendinopatías, esguinces, la bursitis, las roturas y distensiones musculares, así como afecciones del sistema nervioso periférico y dolencias musculares.
Este tipo de tratamiento se dirige a aquellos pacientes con incapacidad laboral por dolencias limitantes, personas deportistas de cualquier edad y pacientes post-quirúrgicos.
Tipo de tratamiento
Se realizan tratamientos individuales, adaptados a cada paciente teniendo en cuenta su patrón patológico. El diagnóstico de cada paciente se realiza mediante una entrevista previa, la exploración física y ecográfica de la zona lesionada.
El tratamiento de cada paciente se realiza de forma ecoguiada y con un seguimiento permanente tanto a nivel de readaptación deportiva como laboral (en caso de que sea necesario). Tras el tratamiento se realizan seguimientos del paciente a medio plazo, para evitar recidivas.