Aunque muchos lo ven como algo inofensivo (o simplemente molesto para quien comparte la cama), el ronquido puede ser mucho más que un sonido nocturno. En algunos casos, podría estar indicando problemas respiratorios, cardiovasculares o incluso trastornos del sueño como la apnea. ¿Sabías que tu cuerpo podría estar pidiendo ayuda mientras duermes?
Durante muchos años se ha considerado que los ronquidos eran simplemente una molestia acústica, pero hoy sabemos que pueden estar relacionados con problemas de salud más serios.
¿Qué es el ronquido primario?
El ronquido primario ocurre cuando no hay apneas, hipopneas ni hipoventilación. Es el extremo más leve de los trastornos respiratorios del sueño. Sin embargo, incluso sin apnea del sueño (AOS), algunos estudios han vinculado los ronquidos con factores de riesgo cardio-metabólicos como la aterosclerosis y la disfunción endotelial.
¿Cómo saber si el ronquido es un problema de salud?
La clave está en diferenciar entre un ronquido simple y uno asociado a AOS. Mientras roncamos, respiramos ruidosamente; pero durante una apnea, dejamos de respirar. Esto último sí representa un riesgo para la salud.
La prueba de referencia para diagnosticar la apnea del sueño es la polisomnografía nocturna completa y vigilada, mucho más precisa que las pruebas reducidas realizadas en casa.
¿Qué factores influyen en el ronquido y cómo se trata?
Además de la relajación muscular durante el sueño, influyen la anatomía orofaríngea, la posición al dormir, el consumo de alcohol, el uso de hipnosedantes y, especialmente, el sobrepeso y la obesidad.
El abordaje del ronquido debe ser multidisciplinar. En casos de ronquido primario, es fundamental actuar con prudencia. No existe una clasificación estandarizada de su gravedad ni protocolos de tratamiento actualizados. Aunque se han utilizado dispositivos de avance mandibular (DAM) y procedimientos quirúrgicos, estos pueden conllevar riesgos y no siempre ofrecen mejoras significativas.
Recomendaciones
Es importante una evaluación cuidadosa. Determinar si el ronquido representa un riesgo para la salud sigue siendo una cuestión abierta. Por eso, ante cualquier duda, lo mejor es consultar con especialistas de la Unidad del Sueño.