Tradicionalmente, la cirugía de varices en verano no estaba recomendada por varios motivos: la necesidad de llevar medias de compresión, la aparición de hematomas o pigmentaciones, la dilatación de las venas con el calor…
Sin embargo, como señala el Dr. Agustín Arroyo, responsable del servicio de cirugía vascular del Hospital Vithas Madrid Aravaca, “hoy en día disponemos de un adhesivo médico llamado cianoacrilato, o como se conoce comúnmente, pegamento, que evita todos estos problemas”.
La aplicación del cianoacrilato está recomendada para varices tronculares, con insuficiencia de los ejes safenos. No requiere quirófano convencional, dura alrededor de una hora y el paciente tratado puede recuperar su actividad normal al día siguiente del tratamiento. Al eliminar los efectos secundarios de otros tratamientos, se puede realizar en verano sin ningún inconveniente.
Tampoco requiere preoperatorio, ni hospitalización ni anestesia, pues es un procedimiento muy sencillo. A través de una pequeña incisión, se introduce dentro de la vena un catéter que va liberando este adhesivo, que sella la vena en lugar de generar un trombo (como sucede con la espuma, el láser o la radiofrecuencia) o de extraerla, (como se hace en cirugía convencional). Al quedar las paredes de la vena completamente pegadas se elimina la necesidad de usar medias compresoras.
Las varices tienen origen genético. Se pueden corregir, pero no desaparecen
Entre el 30 y 50% de la población española presenta algún grado de insuficiencia venosa crónica, especialmente en mujeres, a las que afecta en mayor medida por cuestión hormonal.
El tratamiento con cianoacrilato, al igual que otras intervenciones utilizadas para quitar las varices existentes, visibles, son correcciones puntuales, pues que una persona tenga varices es una tendencia genética que acompaña durante toda la vida. De hecho, un 15% de los pacientes que se opera de varices vuelven a presentar otras con los años, sea cual sea la técnica empleada, aunque el uso del pegamento adhesivo facilita el tratamiento y la recuperación.
Para abordar el tratamiento de las varices visibles y la situación circulatoria de la persona, es fundamental que un cirujano vascular pueda valorar al paciente, generalmente a través de ecodoppler que le permite analizar cómo se encuentra la circulación de retorno.