- La inmunoterapia, combinada con la quimioterapia, aumenta la posibilidad de vivir más tiempo y con mejor calidad de vida en casos de carcinomas de nasofaringe recurrentes o metastásicos
- El Instituto Oncológico Vithas en Madrid está integrado en los hospitales universitarios Vithas Madrid La Milagrosa, Vithas Madrid Aravaca y Vithas Madrid Arturo Soria
- Es un modelo asistencial caracterizado por el trabajo en red, tanto desde el punto de vista asistencial como investigador y docente
La inmunoterapia ha transformado durante los últimos años el abordaje del cáncer de cabeza y cuello, constituyéndose como una alternativa terapéutica eficaz para activar el sistema inmunitario con el objetivo de que los linfocitos ataquen a las células tumorales. El doctor Lisardo Ugidos, oncólogo médico y director de investigación del Instituto Oncológico Vithas (IOV) en Madrid, ha presentado en el congreso nacional de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) el papel de la inmunoterapia en el carcinoma de nasofaringe.
Un papel en el que la inmunoterapia, combinada con quimioterapia, ha demostrado que los pacientes con este tipo de cáncer recurrente o metastásico pueden vivir más tiempo y con mejor calidad de vida. Así, los hospitales universitarios Vithas Madrid La Milagrosa, Vithas Madrid Aravaca y Vithas Madrid Arturo Soria, en los que está integrado el Instituto Oncológico Vithas, ampliarán su cartera de servicios, estableciendo la inmunoterapia como tratamiento de elección en este tipo de tumores.
“El carcinoma nasofaríngeo es un tumor que aparece en el cavum o nasofaringe, es decir, en la parte superior de la faringe, justo por detrás de las fosas nasales”, explica el jefe de la Unidad de Tumores Torácicos y de Cabeza y Cuello del IOV. “La base del tratamiento es la radioterapia y la quimioterapia en estadios iniciales y la quimioterapia en estadios avanzados, pero la inmunoterapia se ha aprobado recientemente en enfermedad recurrente o metastásica, ya que ha demostrado ser más eficaz que la quimioterapia sola”, detalla el doctor Ugidos.
Según diferentes ensayos clínicos, combinar inmunoterapia (anticuerpos anti-PD1) con quimioterapia mejora la respuesta de los pacientes con carcinoma de nasofaringe recurrente o metastásico. “Muchos de ellos van a pasar a ser largos supervivientes en un escenario que, hasta hace no mucho, tenía mal pronóstico”, sentencia el director de investigación del Instituto Oncológico Vithas en Madrid.
El diseño de estos ensayos clínicos se debe a que “las células tumorales tienen diversos mecanismos moleculares para frenar a las del sistema inmunitario, de tal forma que estas no las reconocen y son incapaces de destruirlas”. “Gracias a la inmunoterapia, la inhibición de la proteína PD-1 quita ese freno y activa los linfocitos del paciente para que ataquen a las células tumorales”, añade Lisardo Ugidos. La indicación que tiene hoy en día es como primera línea de terapia sistémica en estadios avanzados y, en este caso, la inmunoterapia debe combinarse con quimioterapia, concretamente con ciplatino y gemcibatina.
“Los resultados son esperanzadores, ya que aumenta tanto la supervivencia libre de progresión como la supervivencia global en cerca del 50%, apareciendo un 20 o 30% de largos supervivientes que van a estar años con la enfermedad controlada”, valora el doctor. En definitiva, “aumenta la posibilidad de vivir más tiempo y con mejor calidad de vida”.
En paralelo, el Instituto Oncológico Vithas en Madrid continúa resaltando el papel de la prevención y del diagnóstico precoz para mejorar los tratamientos y la supervivencia de sus pacientes. A través de su Unidad de Prevención y Diagnóstico Precoz del Cáncer (UPREO), centra su principal objetivo en la detección temprana de tumores con el fin de mejorar el pronóstico de sus pacientes, reducir la mortalidad prematura y evitar la discapacidad asociada a la enfermedad. “Si conseguimos detectar el cáncer en sus fases más iniciales, tendremos mayores tasas de curación con tratamientos menos agresivos”, concluye el Dr. Ugidos.






