Las quemaduras solares en la infancia aumentan el riesgo de cáncer de piel en edad adulta

• El 13 de junio se celebra el Día Mundial contra el Cáncer de Piel                                                                            
• Según el observatorio de la AECC, la incidencia de cáncer de piel no melanoma ha ido aumentando progresivamente en los últimos 4 años.

• La principal medida preventiva es reducir, en la medida de lo posible, la exposición a la radicación UV, propia del sol.

El cáncer de piel se produce por el crecimiento anormal y descontrolado de las células cutáneas. Para su desarrollo, existen diversos factores de riesgo siendo la radiación ultravioleta (UV) uno de los de mayor relevancia, con la ventaja, de que puede evitarse o, al menos, reducirse.  Actualmente, si traducimos este concepto en datos, en Castellón en el año 2021 hubo una incidencia de 285.530 nuevos casos, de los que 119.682 fueron mujeres y 165.848 fueron hombres, siendo la edad entre los setenta y setenta y cinco años, la más frecuente en los diagnósticos, según datos de la Asociación Española contra el Cáncer.

Cada vez nos encontramos ante una población más envejecida y lo esperable es que cada vez, lleguen a consulta más pacientes con lesiones cutáneas. De hecho, según el observatorio de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), la incidencia de cáncer de piel no melanoma ha ido aumentando progresivamente en los últimos 4 años.

ElDr. Julián Boix Vilanova, dermatólogo de Vithas Castellón, considera que, en general, hay varias cosas en las que fallamos con respecto al cuidado y a la prevención del cáncer de piel, “recordemos que ‘la piel tiene memoria’ y durante una época broncearse estuvo de moda con el daño acumulado que esto supone para nuestra piel. Este daño ya está hecho y difícilmente se repara por completo” y añade “actualmente la gente es más consciente de lo nocivo de la radiación UV y es más constante empleando fotoprotector, sin embargo, usar fotoprotectores crea una sensación de falsa seguridad ya que, al tardar más en quemarse, la gente hace exposiciones más largas a las que haría sinfotoprotector y, además, es raro que nos apliquemos la cantidad recomendada”.  Aun así, el Dr. Boix Vilanova insiste en que “envejecer, es un proceso natural que va a predisponer al ser humano a padecer estas dolencias”

El especialista recomienda que revisemos nuestra piel y observemos si hay cambios en ella, y en caso de que así fuera, acudir y consultar siempre al dermatólogo, que es el especialista en la piel, “a parte de la prevención primaria es muy importante informar a la población del aspecto que puede tener el cáncer de piel para que sean capaces de consultar antes de que haya crecido” afirma el Dr. Boix Vilanova.

El especialista de Vithas Castellón recomienda, principalmente, evitar las quemaduras solares durante la infancia y, en la edad adulta reducir, en la medida de lo posible, la exposición a la radicación UV, propia del sol y de las cabinas de autobronceado.  Sobre las cremas con color y fotoprotección solar, el Dr. Boix Vilanova considera que “estas cremas dan color porque generalmente contienen óxido de hierro y este componente hace de filtro para la luz visible, pero como con el resto de los fotoprotectores, deben reaplicarse cada 2 horas aproximadamente según las actividades que llevemos a caboya que factores como el agua y el sudor van a hacer que se pierda antes el efecto del fotoprotector”.

Con la llegada del verano y las vacaciones, los niños parasarán más tiempo realizando actividades y juegos al aire libre por lo que su piel estará más expuesta a las radiaciones UV.  En este caso, el especialista recomienda extremar las precauciones con los niños ya que son especialmente sensibles a las quemaduras solares. El Dr. Boix Vinalona reconoce que “se ha visto que la mayor cantidad de radiación UV acumulada se produce antes de los 18 años y las quemaduras solares en la infancia, son un importante factor de riesgo para el desarrollo de cáncer cutáneo en la edad adulta”.

Por otro lado, el especialista también recomienda extremar las precauciones con los ancianos, evitando la exposición al sol para que no continúen acumulando daño actínico en su piel, y por otro lado, tener en cuenta la medicación que ingieren, ya que existen múltiples fármacos con capacidad fototóxica.