El Virus del Nilo Occidental (VPO) es una enfermedad infecciosa ligada a la picadura de mosquitos.
Las personas infectadas por el Virus del Nilo Occidental (VPO) no suelen manifestar síntomas y, en el caso de hacerlo, suelen ser leves, sin embargo, la infección puede transferirse al cerebro y resultar una enfermedad mortal para aquellas personas con múltiples comorbilidades.
Es importante saber que esta infección no se puede contraer a través de la tos, estornudos ni por tocar a personas infectadas.
¿Quiénes son los más afectados por el Virus del Nilo Occidental?
El Virus del Nilo Occidental puede afectar a cualquier persona que haya tenido una picadura de mosquitos infectados, pero es más agresiva en pacientes con sistemas inmunitarios débiles así como los pacientes de mayor edad y embarazadas.
¿Qué síntomas presenta el Virus del Nilo Occidental?
El periodo de incubación del Virus del Nilo Occidental va de los 2 a 14 días. Entre los síntomas más comunes, entre las personas que sí los manifiestan, se encuentra la fiebre, dolores musculares, dolor de cabeza, inflamación de ganglios y erupción cutánea en la zona de la picadura.
Los síntomas más graves, que requieren hospitalización, se encuentra la inflamación del cerebro (encefalitis) o inflamación del área alrededor del cerebro y en la médula espinal (meningitis). Se suman, además:
- Dolor de cabeza
- Fiebre
- Rigidez de cuello
- Deterioro del nivel de conciencia, confusión, agitación, alucinaciones y, en algunos casos, convulsiones
Estos síntomas tan solo afectan al 1% de las personas infectadas, en el 80% de los casos, los pacientes no desarrollan ningún síntoma o estos son leves.
¿Cómo se detecta el Virus del Nilo Occidental?
La prueba para detectar un posible contagio de VPO se realiza a través de un análisis de sangre y de líquido cefalorraquídeo en laboratorios especializados.
¿Cómo se evita una posible infección?
La mejor prevención viene de la mano de evitar las posibles picaduras. Para ello se recomienda:
- Evitar las zonas con presencia de mosquitos.
- Usar repelente de mosquitos así como mosquiteras en ventanas.
- Evitar las horas punta de amanecer y atardecer, cuando los mosquitos son más activos.
- Uso de ropa con manga larga y pantalón largo.
