La práctica de actividad física y la alimentación son claves para mantener un estilo de vida saludable, especialmente, durante el embarazo. Según un estudio publicado en la European Journal of Obstetrics Gynecology and Reproductive Biology, la práctica de ejercicio en grupo, como por ejemplo ...
La práctica de actividad física y la alimentación son claves para mantener un estilo de vida saludable, especialmente, durante el embarazo. Según un estudio publicado en la European Journal of Obstetrics Gynecology and Reproductive Biology, la práctica de ejercicio en grupo, como por ejemplo el yoga, posee innumerables beneficios que mejoran la calidad de vida de las mujeres desde el inicio de la maternidad. El Dr. Eleazar Bravo, especialista de ginecología y obstetricia de Vithas Las Palmas, recuerda que “entre los innumerables beneficios del ejercicio físico para las embarazas, en la mayoría de los casos, la práctica del yoga puede ayudar a las futuras madres a prepararse para el parto”.
“El yoga prenatal es una actividad física que permite practicar técnicas de respiración y estiramientos útiles durante el parto, así como una mayor capacidad para concentrarse y relajarse en un momento de estrés físico para las embarazadas”, explica el especialista. “Como cualquier actividad deportiva, si el yoga se realiza con las medidas de seguridad adecuadas, tanto para la madre como el feto, los beneficios para la salud de la embarazada son varios: aumenta la resistencia de los músculos que intervienen en el parto, reduce el dolor de espalda, las náuseas y las cefaleas, disminuye la ansiedad y el estrés, etc.”.
Combatir la depresión prenatal
Según un estudio publicado en la BMC Psychiatry, la práctica de yoga prenatal puede reducir parcialmente los síntomas depresivos con eficacia. “La depresión prenatal o antenatal, que es igual de común a la depresión posparto, es uno de los problemas psicológicos que puede darse durante el embarazo. Suele estar vinculada con la ansiedad y la depresión que experimentan algunas madres como consecuencia de las alteraciones que quizás experimente su cuerpo durante la gestación”, detalla el especialista de Vithas Las Palmas.
“Las alteraciones del sueño y del apetito, la irritabilidad emocional y sensibilidad -derivadas de los cambios hormonales durante el embarazo-, así como las preocupaciones que surgen antes de dar a luz, pueden llevar a padecer este tipo de depresión, afectando a la felicidad de las embarazadas”. Por eso, la práctica de yoga puede ayudar a contrarrestar estos síntomas depresivos en las embarazadas.
“El yoga es una actividad física en la que se aprende a controlar la respiración y también potencia la corrección postural. Además, varios estudios apuntan que la práctica de yoga prenatal durante unos 90 minutos ayuda a disminuir los niveles de cortisol y, por tanto, genera un estado de ánimo positivo en las madres”, destaca el Dr. Bravo.
La seguridad, fundamental en el yoga durante el embarazo
Existen distintos tipos de yoga - hatha yoga, bikram yoga…- sin embargo, no todas las modalidades son recomendables para las embarazadas. Así, por ejemplo, el yoga bikram, que se realiza en un espacio a altas temperaturas, está contraindicado durante la maternidad, ya que puede llegar a generar hipertermia.
“Antes de comenzar a hacer yoga durante el embarazo lo mejor es consultarlo con el especialista que te acompañe durante la esta etapa por si estuviera contraindicado. En ocasiones, en embarazos de riesgo puede resultar contraproducente tanto para la madre como para el feto”, insiste el ginecólogo. Además, “es recomendable realizar una actividad moderada, dentro de una rutina, sin sobresforzarse físicamente”.
