Bostezos, cansancio, irritabilidad o inapetencia son algunos de los síntomas que muestran los niños que padecen la astenia primaveral. Un estado transitorio caracterizados por la pérdida de energía y la caída libre de las defensas del organismo que puede llegar incluso a dificultar en gran medi...
Bostezos, cansancio, irritabilidad o inapetencia son algunos de los síntomas que muestran los niños que padecen la astenia primaveral. Un estado transitorio caracterizados por la pérdida de energía y la caída libre de las defensas del organismo que puede llegar incluso a dificultar en gran medida las relaciones con su entorno, así como académicas. Desde la unidad de pediatría del Hospital Vithas Valencia Consuelo, Vithas 9 de Octubre y Vithas Castellón pautan las medidas a seguir por padres para combatir esta sintomatología típica de la primavera.
Sistema endocrino
Los síntomas descritos suelen aparecer coincidiendo con el cambio de tiempo y que provoca una alteración en el ritmo biológico del niño. En general, duran entre una semana y quince días, más o menos lo que tarda el organismo en adaptarse a los días largos de sol y a las nuevas temperaturas que llegan en esta estación. El doctor Javier Miranda, uno de los responsables de la unidad, hace hincapié en el sistema endocrino, “los cambios de estación causan una alteración en los niveles de determinadas hormonas, en concreto hay una disminución de la betaendorfina, que es la que produce bienestar en el organismo. La carencia de esta hormona, -explica-, provoca irritabilidad, nerviosismo, tristeza, cansancio y apatía.”
¿Cuándo acudir al médico?
Si los síntomas claros de astenia se alargan más de quince días o si el niño además asocia mocos, estornudos repetidos, picor de nariz y de ojos, febrícula (37,5-37,8°C) o diarrea ya no se trata de astenia. En el caso de que se sumen estos síntomas, "se debe llevar al niño al pediatra ya que puede ser el inicio de alguna enfermedad como resfriado, gastroenteritis, otitis o incluso alergia. Es necesario esta consulta para pautar el tratamiento adecuado y evitar complicaciones. En nuestras unidades de pediatría disponemos de estrictos protocolos de seguridad específicos que garantizan la seguridad del niño, la de su acompañante y la nuestra en los momentos que estamos viviendo por la situación que genera el miedo al contagio por el coronavirus”.
Cómo prevenir y tratar la astenia primaveral en niños
Estilo de vida: factor determinante para prevenir la aparición de la astenia primaveral. “Los más pequeños necesitan una rutina establecida para que su desarrollo físico y psicológico sea adecuado” concluye el profesional, quien recomienda” llevarlos a la calle en esta desescalada a que realicen ejercicio físico como patinar, caminar o ir en bici, ya que estimula la liberación de dopamina y endorfinas que levantan el ánimo de los más pequeños”.
Dieta equilibrada y una alimentación saludable: Pilares indiscutibles para prevenir la astenia primaveral. “El aporte de nutrientes y vitaminas adecuado es indispensable para que el niño tenga una salud física y mental adecuada sin olvidar una buena hidratación”, concluye el doctor Miranda.
Descanso adecuado: los niños deberían dormir entre 9 y 10 horas hasta los 18 años. “De hecho, -añade- está demostrado que los niveles de cortisol, que es la hormona del estrés, se reducen muchísimo después de un buen descanso y, al contrario, cuando se duerme menos de lo que se debe, estos aumentan”. Esta hormona está relacionada, además, con el sobrepeso ya que la escasez de descanso aumenta el nivel de apetito incrementando nuestra necesidad de glucosa.
