En España, según la Sociedad Española de Reumatología, aproximadamente un 20% de mujeres entre 50 y 84 años tienen osteoporosis, sin que se generen síntomas hasta que se produce la fractura por fragilidad.
La osteoporosis es una enfermedad metabólica del hueso que va produciendo una pérdida de masa ósea, alterándose la microarquitectura ósea y disminuyendo la resistencia del hueso, lo cual lo hace más propenso a tener fracturas. La consecuencia clínica de la osteoporosis son las fracturas por fragilidad. El riesgo de sufrir estas fracturas, al igual que la propia osteorporosis, aumenta en ciertos.
Perfiles con alto riesgo de padecer osteoporosis y fracturas por fragilidad
Los perfiles de pacientes con alto riesgo de osteoporosis y fracturas tiene un amplio espectro, desde mujeres con menopausia precoz, pacientes oncológicos de cáncer de mama o cáncer de próstata, los pacientes trasplantados o los pacientes con inmovilizaciones prolongadas entre otros.
Estos pacientes deben tener un seguimiento adecuado, evaluando periódicamente su masa ósea, remodelado óseo y riesgo de fractura.
Los perfiles con mayor riesgo son:
- Pacientes con menopausia precoz o quirúrgica (la dada en mujeres menores de 45 años)
- Pacientes con pérdida ósea postmenopáusica (acelerada)
- Pacientes con osteoporosis por glucocorticoides
- Mujeres con cáncer de mama
- Varones con cáncer de próstata
- Pacientes con patología reumática inflamatoria y autoinmune
- Pacientes con trasplante de órganos
- Pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica
- Pacientes con VIH y tratamiento con retrovirales
- Pacientes postcirugía bariátrica
- Inmovilización prolongada: lesionados medulares, daño cerebral
- Pacientes oncológicos en tratamiento con quimioterapia
- Pacientes con diabetes tipo I y tipo II
- Pacientes con alto riesgo de fractura
- Paciente “frágil”, con osteoporosis y/o sarcopenia
- Pacientes con trastornos conducta alimentaria: anorexia nerviosa
Los pacientes con riesgo elevado de padecer osteoporosis y/o alto riesgo de fractura por fragilidad, deben tener un seguimiento adecuado, evaluando periódicamente su masa ósea, remodelado óseo y riesgo de fractura.
