Las pruebas durante el embarazo

Las pruebas durante el embarazo

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La Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) considera que el intervalo entre las consultas debe estar determinado por la naturaleza de la gestación y de las necesidades individuales de cada mujer. Por eso, para unos mejores resultados perinatales es recomendable realizar entre si...

La Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) considera que el intervalo entre las consultas debe estar determinado por la naturaleza de la gestación y de las necesidades individuales de cada mujer. Por eso, para unos mejores resultados perinatales es recomendable realizar entre siete y diez consultas prenatales durante un embarazo normal. Sin embargo, ¿qué pruebas debe realizarse una mujer para un adecuado control del embarazo?

Valoración de la historia clínica, primera ecografía y analítica

Diferentes sociedades médicas y científicas, como la SEGO, recomiendan que las mujeres realicen una visita preconcepcional a su especialista, de cara a conseguir el mejor estado de salud posible para la futura gestación. En esta consulta el obstetra asesorará a la futura embarazada sobre la alimentación, hábitos a evitar durante el embarazo, como el consumo de tabaco, o los diferentes suplementos a tomar previo a la gestación.

“En esta consulta valoramos la historia clínica de la paciente, realizamos una exploración física, datamos la gestación mediante una ecografía y solicitamos una analítica del primer trimestre de sangre, orina y una serología”.  Dra. Carla Mendoza, especialista del servicio de ginecología y obstetricia de Vithas Las Palmas

El screening del primer trimestre

 Una vez confirmado el embarazo, la siguiente visita que deben realizar las futuras madres a la consulta de su ginecólogo es entre la semana 11-13. En esa cita se realizará el cribado del primer trimestre y el médico valorará mediante ecografía, analítica y la edad materna el riesgo de Síndrome de Down, Síndrome de Edwards o Síndrome de Patau en la gestación. A partir de este momento recomendamos que, en gestaciones de bajo riesgo, la embarazada visite mensualmente a su especialista para así llevar a cabo un mejor control materno-fetal, siempre individualizando las características específicas de cada paciente.

Ecografía morfológica en el segundo trimestre

Con esta prueba se valora la anatomía fetal y placentaria, detectando así anomalías estructurales y marcadores ecográficos de cromosomopatías. En este trimestre también se realizará una segunda analítica, que incluye una analítica de sangre y otra de orina. Además, es importante llevar un seguimiento del control del crecimiento fetal mediante las distintas ecografías que realizaremos hasta llegar al término de la gestación. 

Desde el segundo trimestre es importante que la embarazada conozca aquellos síntomas que puede presentar y por los que debe acudir a urgencias: dolor abdominal, sangrado vaginal, expulsión de líquido o contracciones regulares. Además, en el caso de tener más de 28 semanas de gestación, si la paciente nota una disminución de los movimientos fetales, también deberá acudir a urgencias.

Últimas pruebas antes del parto

En la consulta del último trimestre se llevará a cabo una valoración más exhaustiva, tanto materna como fetal, de cara a la correcta finalización de la gestación. En este tercer trimestre “la embarazada debe realizarse una analítica que incluirá hemograma, bioquímica, coagulación, un análisis de orina y una nueva serología.

"Hay que realizar también un exudado vaginorectal para la detección de una bacteria llamada Streptococo Agalactiae, que nos indicará la necesidad de poner antibioterapia o no en el caso de que se produzca la rotura prematura de membranas durante el parto".

 

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