- David Piñero, optometrista del Hospital Vithas Medimar, recuerda en el Día Mundial de la Salud Visual que “seguir unos hábitos en el día a día pueden suponer, sin ningún esfuerzo, un gran impacto positivo en nuestra visión”
Alicante, 19 de mayo de 2023. La visión es un sentido que nos permite interaccionar con nuestro entorno, desarrollarnos y realizar una gran cantidad de tareas diarias, “por tanto, debemos cuidarla y ser consciente de la importancia de la prevención y de evitar su deterioro”, explica David Piñero, optometrista del Hospital Vithas Medimar.
Para ello, comenta, “hay una serie de hábitos sencillos que podemos adquirir y que no suponen ningún esfuerzo, pero en cambio tienen un gran impacto positivo en nuestra visión”.
En primer lugar, “debemos de tratar de combinar nuestra actividad cotidiana en el hogar y en el trabajo con la realización de actividades al aire libre, especialmente en niños, siendo recomendable al menos 2 horas diarias de dichas actividades”. En este sentido, recomienda que, “al realizar tareas al aire libre es necesario el uso de gafas de sol para prevenir potenciales daños asociados a un exceso de radiación solar, ya que esta radiación contiene luz ultravioleta, que es un factor de riesgo para nuestros ojos y produce un efecto acumulativo que podría desencadenar en algún caso en problemas en los fotorreceptores, mala visión de forma progresiva, alteraciones del campo de visión, alteraciones de la piel que rodea al globo ocular, degeneraciones retinianas, o la aparición de un pterigión, tejido que invade la córnea”.
En el caso de la población infantil, este tema cobra una importancia significativa, ya que “los niños y niñas son sobre todo sensibles a esta radiación, puesto que el cristalino resulta muy transparente hasta la adolescencia, en estos casos son necesarios filtros de mayor protección”, añade el experto.
Aprender a utilizar los dispositivos electrónicos
Como todo, cualquier exceso puede ser nocivo, pero eso no significa que haya que evitar su uso “a toda costa o prohibirlo, puesto que vivimos en una sociedad en la que su uso es inevitable, ya que forma parte de muchas de nuestras tareas cotidianas”, explica David Piñero.
“Pero es importante enseñar a usarlos sin hacernos daño. Lo primero, mantener una distancia adecuada (35-40 cm), ya que el uso a distancias muy próximas puede producir fatiga ocular, borrosidad transitoria e incluso contribuir a la aparición de la miopía. Asimismo, es importante seguir la regla del 20-20-20, que implica realizar descansos de 20 segundos cada 20 minutos de trabajo con dispositivos mirando a 20 pies (a lo lejos). Estos descansos intermitentes permiten prevenir el cansancio ocular”.
En caso de usar lentes de contacto, se deben seguir estrictamente las recomendaciones del profesional, evitando el sobreuso de las mismas y una higiene inadecuada que puedan conducir a inflamaciones e infecciones oculares.
Por último, Piñero recuerda que “debemos de tratar de evitar el frotamiento continuo y enérgico de los ojos y en caso de continuo picor acude al especialista para que evalúe si nos encontramos ante un cuadro alérgico ocular”.
En esta misma línea, la unidad de oftalmología de los Hospitales Vithas en Alicante, recomienda no dejar de usar la corrección visual en caso de que se haya recomendado y evitar molestias visuales innecesarias. Así, realizar revisiones anuales con un profesional de la visión, supone una prevención activa y un modo de consultar todas aquellas dudas, dificultades o síntomas que hayas podido experimentar.
