- Tipo de prueba: Pruebas ginecológicas
- Duración: 30 minutos
- Acompañado: NO
¿Qué es una histeroscopia?
La histeroscopia es un procedimiento médico que permite a los médicos examinar el interior del útero utilizando un instrumento delgado e iluminado llamado histeroscopio. Se puede usar para diagnosticar y tratar ciertas afecciones asociadas con el útero, como fibromas, pólipos y otros crecimientos anormales. También se puede utilizar para evaluar la infertilidad o el sangrado anormal. Mediante el uso de la histeroscopia, los médicos pueden obtener una visión interna de lo que sucede en el útero y tomar decisiones más informadas sobre las opciones de tratamiento.
¿Quién debe someterse a una histeroscopia?
Una prueba diagnóstica histeroscópica es un procedimiento utilizado para examinar el útero y las trompas de Falopio con el fin de diagnosticar cualquier anomalía o enfermedad. Esta prueba puede ser beneficiosa para las mujeres que experimentan infertilidad, abortos espontáneos recurrentes o sangrado anormal. También se puede utilizar para detectar problemas estructurales como fibromas, pólipos o tejido cicatricial. Además, puede ayudar a diagnosticar el cáncer de endometrio y otros trastornos ginecológicos.
¿Cómo se realiza la histeroscopia?
La histeroscopia es un procedimiento mínimamente invasivo que se usa para diagnosticar y tratar ciertas afecciones en el útero. Para ello, se inserta un dispositivo parecido a un telescopio delgado e iluminado, llamado histeroscopio, a través de la vagina y el cuello uterino hasta el útero.
El histeroscopio amplía el interior del útero para que pueda verse en un monitor. La histeroscopia se puede usar para diagnosticar y tratar muchas afecciones, como fibromas uterinos, pólipos, tejido cicatricial, cáncer de endometrio y dolor pélvico.
¿Cuáles son los riesgos asociados con la histeroscopia?
La histeroscopia es un procedimiento médico importante que se utiliza para diagnosticar y tratar ciertas afecciones del útero. Aunque es un procedimiento seguro y eficaz, existen algunos riesgos asociados que deben tenerse en cuenta antes de someterse al procedimiento, como cólicos leves y un poco de secreción con sangre. Las complicaciones graves son raras, pero pueden incluir sangrado abundante, infección y desgarros en el útero.