- Tipo de prueba: Pruebas hepatológicas
- Duración: 15 minutos
- Acompañado: SI
¿Qué es?
La ecografía abdominal es una técnica diagnóstica que utiliza el sonido para explorar los órganos del interior del organismo. El aparato con el que se hace la exploración emite un sonido de frecuencia muy alta (ultrasonido) que no es audible por el oído humano y que al chocar con un órgano interno como el hígado o el riñón refleja ese sonido y lo devuelve al aparato que lo representa en un monitor de televisión. De esta manera podemos estudiar cualquier órgano que sea sólido o esté lleno de líquido como la vesícula biliar.
Limitaciones de la ecografía abdominal
Los órganos que contienen grasa o aire (gas intestinal) son difíciles o imposibles de valorar, ya que estos dos elementos transmiten muy mal el sonido. El sonido no se transmite igual en todas las personas, existiendo una serie de factores como la edad y la obesidad que condicionan en parte la calidad de la imagen ecográfica y por tanto la capacidad de la técnica para obtener una buena imagen y establecer un diagnóstico de seguridad.
En estos casos, la exploración da resultados de mala calidad en pequeños grupos de pacientes y no sirve, teniéndose que recurrir en estos casos a otras técnicas de imagen como el TC o la resonancia magnética.
Por último la técnica de la ecografía se puede asociar a la endoscopia (ecoendoscopia) para hacer ecografía de zonas muy concretas del organismo desde el interior del tubo digestivo.
¿Cómo he de prepararme?
- Normalmente, la realización de una ecografía no requiere de una preparación especial.
- Sin embargo, si se trata de una ecografía abdominal, es necesario estar en ayunas las 6-8 horas previas a la prueba.
- En caso de que se vayan a estudiar órganos de la pelvis como el útero o la vejiga de la orina, conviene beber al menos un litro de agua en la hora previa a la prueba para tener llena la vejiga. Esto permite observar mejor los órganos de la pelvis.
¿Cómo se hace?
- Las ecografías pueden hacerse de forma ambulatoria, ya que no precisa de una preparación especial o que estés hospitalizado.
- Se unta un gel, que actúa como transmisor, en la zona del cuerpo que va a someterse a la ecografía y mediante un aparato (transductor) que envía ondas de ultrasonido, se toman imágenes de la zona.
- El sonido del transductor se refleja en las estructuras del interior del cuerpo, y esto proporciona una información que, tras ser analizada por un ordenador, genera una imagen.
- Las imágenes en movimiento se imprimen y también pueden ser grabadas, por ejemplo, se puede ver el latido fetal, o el paso de la sangre a través de los vasos.
¿Qué se siente?
- Los estudios ecográficos, en general, son exámenes indoloros si bien en determinados casos, como es la ecografía pélvica el paciente puedes sentir una leve molestia por la presión de la sonda y la necesidad de contener la micción.
- La aplicación del gel frío también puede suponer una ligera molestia para el paciente al principio del estudio.
- La prueba se realiza en unos 15 minutos. Si se realiza una intervención como una toma de biopsias o el drenaje de un absceso, puede durar algo más.
Recuperación
- Las ecografías, al ser pruebas mínimamente invasivas, no necesitan de ninguna recuperación especial.
- Una vez realizada la prueba, se te limpiará el gel y podrás regresar a casa.
¿Qué riesgos existen?
- La realización de ecografías no supone riesgo alguno para el paciente, ya que no implica una exposición a radiación.
- Esta es una técnica no invasiva y por lo tanto segura. No obstante, los médicos y especialistas del Vithas te informarán con todo detalle ante cualquier duda.