El desarrollo de esta patología se debe parcialmente al estrés oxidativo que se produce cuando el cerebro se expone a radicales libres, moléculas inestables que surgen durante el metabolismo normal de las células y que deben de desecharse. La actividad física puede enlentecer la progresión del alzhéimer y otras enfermedades neurodegenerativas. Varias investigaciones alrededor del mundo concluyen que hasta un 21% de casos de alzhéimer pueden ser atribuidos al sedentarismo
Actualmente, en torno a unas 800.000 personas en España y 50 millones alrededor del mundo padecen la enfermedad de Alzhéimer según la Sociedad Española de Neurología (SEN). Uno de los aspectos difíciles de esta enfermedad es que no tiene tratamiento curativo sin embargo puede prevenirse con un estilo de vida saludable. “Sabemos que una adecuada alimentación, ejercicio o tener buena gestión de la ansiedad, entre otros hábitos de vida, son muy importantes para la prevención de esta enfermedad”, apunta la Dra. Daniela Silva, geriatra y responsable de la Unidad de Asistencia Médica a Domicilio de Vithas Internacionalquien expone que el desarrollo de esta patología se debe en gran medida al estrés oxidativo y la neuro inflamación.
Sobre este punto, la especialista explica que el estrés oxidativo se produce cuando el cerebro se expone a radicales libres, moléculas inestables que surgen durante el metabolismo normal de las células y que deben de desecharse. “Cuando no se hace, estas causan daño en el ADN y degeneración de las neuronas”, apunta la doctora quien señala, “para contrarrestar la presencia de esta sobreproducción de radicales libres en el cerebro es importante la actividad física o la alimentación”.
En este sentido, la doctora apunta que varios estudios epidemiológicos apoyan la hipótesis de que la actividad física puede enlentecer la progresión del alzhéimer y otras enfermedades neurodegenerativas. “Varias investigaciones alrededor del mundo concluyen que hasta un 21% de casos de alzhéimer pueden ser atribuidos al sedentarismo.[1] Esto hace que de la actividad física sea una herramienta poderosa para reducir el riesgo de padecer esta enfermedad”, destaca.
La relación entre la diabetes y el alzhéimer
Por otra parte, y en relación con la asociación entre un incremento crónico de la glucosa e insulina y el deterioro cognitivo, la Dra. Silva destaca que la resistencia a la insulina a nivel cerebral parece jugar un papel importante en el desarrollo y la progresión del alzhéimer. Algunos estudios han encontrado que las personas con diabetes tienen hasta un 65% más riesgo de desarrollar alzhéimer comparados con personas sin diabetes.[2] “Se cree que esto ocurre por un aumento en el nivel de estrés oxidativo generado parcialmente por los niveles elevados de glucosa e insulina en sangre, como sucede en la diabetes tipo 2. Lo anterior altera la función mitocondrial, función cognitiva y la memoria”, explica.
Adicionalmente, se ha encontrado que la edad a la cual se diagnostica la diabetes también tiene un impacto significativo en el riesgo de desarrollar demencia. Un estudio de Reino Unido publicado en 2021[3], hizo seguimiento a más de 10,000 pacientes durante un promedio de 31 años y encontró que, además de haber una asociación entre la diabetes y el riesgo de padecer alzhéimer, dicho riesgo aumenta cuando la diabetes se diagnostica en edades más jóvenes.
A medida que la población mundial envejece y la expectativa de vida aumenta, las demencias serán más prevalentes. Por eso, concluye la Dra. Silva, necesitamos continuar investigando posibles curas sin perder de vista un objetivo final; reducir el máximo la incidencia del alzhéimer lo cual al parecer se puede lograr con una prevención adecuada.
[1] Potential for primary prevention of Alzheimer's disease: an analysis of population-based data. The Lancet. https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S147444221470136X
[2] Diabetes Mellitus and Risk of Alzheimer Disease and Decline in Cognitive Function | Dementia and Cognitive Impairment | JAMA Neurology | JAMA Network
[3] Association Between Age at Diabetes Onset and Subsequent Risk of Dementia | Dementia and Cognitive Impairment | JAMA | JAMA Network