“El procedimiento de un masaje cardíaco se puede aprender en dos horas, y, si la sociedad supiese reaccionar ante una parada cardíaca, se podría reducir notablemente la alta tasa de muertes por ataques de corazón”, afirma el Dr. Estarán, cardiólogo en el Hospital Vithas Vitoria
Las enfermedades cardiovasculares son la causa más importante de mortalidad a nivel mundial. Solo en el País Vasco, alrededor de 1000 personas mueren al año por problemas relacionados con el corazón. Esto se resume a 85 personas al mes, y, mirándolo desde una perspectiva más corta, 3 personas cada día. Esta cifra podría reducirse si se generalizaran las técnicas de reanimación cardiopulmonar entre la población, ya que, la mayoría de las personas afirman no tener conocimientos suficientes y necesarios para hacer frente a una situación como esta.
Aunque muchos de los paros cardiacos son fulminantes y no se puede realizar ningún procedimiento para salvar la vida de la víctima, sería esencial que toda la población supiese hacer uso de un buen procedimiento de masaje o reanimación cardiaca, ya que, según el Dr. Estarán, cardiólogo del Hospital Vithas Vitoria, puede salvar la vida del implicado hasta en un 40% de estos casos, podría evitarse la muerte.
Estudios realizados en Euskadi confirman que solo el 10% de los vascos que sufren parada cardíaca, logran salir de ella. Y es que cuando alguien la sufre, es esencial actuar con rapidez, ya que cada minuto que pasa se reduce aproximadamente un 10% la probabilidad de seguir con vida. “Si la ciudadanía dedicara 2 horas a aprender como efectuar las maniobras de resucitación cardiopulmonar de manera correcta, podríamos hablar de cuadruplicar las cifras de supervivencia entre las personas que sufren paro cardiaco”, afirma el Dr. Estarán.
Por eso, el equipo de cardiología del Hospital Vithas Vitoria nos ofrece en el Día Mundial del Corazón, una guía sobre cómo debemos actuar si la persona que tenemos a nuestro lado sufre una parada cardíaca.
Procedimiento “cadena supervivencia”
- Alerta precoz: Alertar a los servicios de emergencia (112)
- SVB (Soporte Vital Básico):
- Existe importancia crítica de las interacciones entre el operador telefónico del servicio de emergencias médicas, el testigo que realiza la RCP y el despliegue a tiempo de un desfibrilador externo automatizado (DEA). Una respuesta coordinada eficaz de la comunidad que agrupe estos elementos es clave para mejorar la supervivencia de la parada cardiaca extra-hospitalaria.
- El operador telefónico de emergencias médicas juega un papel importante en el diagnóstico precoz de la parada cardiaca, la realización de RCP con ayuda telefónica (conocida también como RCP telefónica), y la localización y disponibilidad de un DEA.
- El testigo formado y capacitado debería valorar a la víctima del colapso rápidamente para determinar si no responde y no respira normalmente y luego alertar inmediatamente a los servicios de emergencias.
- La víctima que no responde y no respira normalmente está en parada cardiaca y requiere RCP.
- Los que realizan la RCP deberían dar compresiones torácicas en todas las víctimas de parada cardiaca. Los que estén formados y sean capaces de hacer respiraciones de rescate deberían realizar compresiones torácicas y respiraciones de rescate combinadas.
- La victima debe estar boca arriba y sobre una superficie dura, para poder abrir la vía aérea y las compresiones torácicas. Para ello, realizaremos la maniobra frente mentón, que consiste en elevar ligeramente su barbilla para facilitar el paso de aire. Para realizar el masaje cardiaco el reanimador debe abrir los dedos de una mano y colocar el talón de la misma sobre el esternón, luego se coloca la otra mano sobre la primera y se extienden los brazos para realizar la fuerza con todo el cuerpo.
- La RCP de alta calidad sigue siendo esencial para mejorar los resultados. Los que realizan RCP deberían asegurar compresiones torácicas de profundidad adecuada (aproximadamente 5cm pero no más de 6 cm en el adulto medio) con una frecuencia de 100-120 compresiones por minuto. Permitir que el tórax se reexpanda completamente tras cada compresión y minimizar las interrupciones en las compresiones. Cuando se administren respiraciones de rescate/ventilaciones, emplear aproximadamente 1 segundo para insuflar el tórax con un volumen suficiente para asegurar que el tórax se eleve visiblemente. La relación de compresiones torácicas y ventilaciones sigue siendo 30:2. No interrumpir las compresiones torácicas durante más de 10 segundos para administrar ventilaciones.
- La desfibrilación en los 3-5 primeros minutos del colapso puede producir tasas de supervivencia tan altas como 50-70%. Se puede conseguir desfibrilación precoz por los que hacen la RCP mediante la utilización de DEA de acceso público in situ. Se deberían implementar activamente programas de acceso público a DEA en los espacios públicos que tengan una alta afluencia de personas. (estadios, grandes superficies…)
- La secuencia de RCP del adulto puede utilizarse con seguridad en niños que no responden y no respiran con normalidad. La profundidad de las compresiones torácicas en niños debería ser de al menos un tercio del diámetro torácico anteroposterior (para lactantes esto es 4 cm, para niños 5 cm).
“Si conseguimos que la sociedad sea capaz de realizar este procedimiento sin problema, podemos conseguir que las posibilidades para que la persona que sufra una parada siga con vida, aumenten hasta un 40%,” aconseja el cardiólogo vitoriano.
Sobre el Hospital Vithas Vitoria
El Hospital Vithas Vitoria dispone de dos centros de actividad: el propio hospital y el Centro de Especialidades Beato nº3. A través de ambos se articulan algunos de los programas especializados más innovadores del País Vasco, entre los que se encuentra la aplicación de técnicas endoscópicas avanzadas.
Con una inversión de 7 millones de euros para el período 2013-2016, la innovación y el servicio personalizado al paciente se sitúan en el centro y se ponen en marcha a través de nuevos servicios: la Unidad del Sueño (febrero de 2014) y Unidad de Cirugía Artroscópica (abril de 2014). La Unidad de Asistencia a Lesionados de Tráfico, la Unidad de Obesidad, son otras de las unidades especializadas del centro vitoriano. Además, es pionero en España en el tratamiento de carcinomatosis peritoneal con un equipo de profesionales expertos en tratar los tumores malignos gastrointestinales.
Actualmente, el Hospital Vithas Vitoria pone a disposición de los pacientes 65 camas, 6 quirófanos, 6 camas con un BOX de aislamiento en UCI y 56 despachos de consultas externas, entre otras instalaciones sanitarias. Trabaja con las principales compañías de seguros nacionales e internacionales y cuenta, entre otras especialidades, con las siguientes: Anestesiología, Aparato Digestivo, Medicina Interna, Cardiología, Angiología y Cirugía Vascular, Cirugía Cardiaca, Cirugía Estética, Plástica y Reparadora, Cirugía General y del Aparato Digestivo, Cirugía Maxilofacial, Dermatología, Ginecología, Oftalmología, O.R.L., Urología, Traumatología y Cirugía Ortopédica.
El compromiso de Vithas: calidad asistencial acreditada, servicio personal y largo plazo
Vithas es el primer operador sanitario de capital 100% español y el segundo a nivel nacional. Cada año atiende a más de 4.500.000 pacientes en sus 19 hospitales y 25 centros especializados denominados Vithas Salud. Los 44 centros se encuentran distribuidos a lo largo de todo el territorio nacional y destacan los hospitales de Alicante, Almería, Benalmádena, Castellón, Granada, Las Palmas de Gran Canaria, Lleida, Madrid, Málaga, Sevilla, Tenerife, Vigo, Valencia y Vitoria-Gasteiz. Los 25 centros Vithas Salud se encuentran en Alicante, Elche, El Ejido, Fuengirola, Granada, La Estrada, Las Palmas de Gran Canaria, Lleida, Madrid, Málaga, Marín, Nerja, Pontevedra, Rincón de la Victoria, Sanxenxo, Sevilla, Torre del Mar, Torremolinos, Vilagarcía, y Vitoria-Gasteiz.
Vithas cuenta adicionalmente con la red de laboratorios Vithas Lab, con más de 300 puntos de extracción repartidos por toda España, y con un acuerdo estratégico en Baleares con la Red Asistencial Juaneda que dispone de 5 hospitales y una amplia red de centros médicos repartidos por toda la región.
La apuesta de Vithas por una asistencia sanitaria de calidad acreditada y un servicio personal va unida al firme apoyo y visión de largo plazo de los accionistas de Vithas: Goodgrower, quien controla un 80% del capital, y grupo ‘la Caixa’, con el 20% restante.
Con un modelo de crecimiento que se basa en la diversificación geográfica y la sostenibilidad, Vithas prevé seguir consolidando su presencia nacional tanto con la apertura de nuevos centros como mediante adquisiciones.